Duración: 26:51 min
En inglés con subtítulos en español
Con su serenidad y sabiduría habitual, Thich Nhat Hanh nos recuerda que siempre podemos traer nuestra atención nuevamente al cuerpo, al aquí y ahora, y encontrar así la paz, poniendo foco en la respiración y no en las emociones.
Tendemos a huir del sufrimiento, lo cubrimos con consumos de todo tipo, pero la solución es abrazar la energía del dolor con la energía superior de la compasión que abraza al dolor como una madre a su hijo: «hola dolor, sé que estás ahí, te voy a cuidar», explica Thays.
Al final, habla del verdadero amor y sus elementos: la bondad amorosa, la compasión, la alegría y la inclusividad. Dice: «El verdadero amor siempre crece. No conoce fronteras».
Un detalle para los que observan los pequeños gestos: vale la pena ver en el minuto 10:09 cómo Thich Nhat Hanh se sirve un vaso de agua. El nivel de presencia que tiene, de atención plena mientras lo hace, es asombroso.
Un comentario
Maravilloso!!!! Es aprender a estar en el presente aqui y ahora gracias!!!!!